El Ciclo Económico Inmobiliario
Noviembre 26 de 2020En esta nueva publicación compartiremos con ustedes un modelo muy interesante para analizar los mercados inmobiliarios. La industria inmobiliaria está muy ligada a los ciclos económicos que responde a diversas variables económicas que afectan directamente a la oferta y demanda en el mercado.
Entre las principales variables que afectan el ciclo económico están: tasas de empleo, el costo del dinero y acceso al crédito, el crecimiento demográfico, el entorno político y legal, políticas sociales, políticas de planificación urbana.
Como inversionistas en bienes raíces es importante estudiar estas variables y hacerles seguimiento para conocer en qué momento del ciclo inmobiliario se encuentran las zonas o ciudades de nuestro interés para poder tener la estrategia adecuada.
El ciclo económico inmobiliario tiene 4 fases:
Te explicamos en qué consiste cada fase y cuál es la mejor estrategia para cada una.
A. Mercado en crecimiento: se caracteriza por la baja oferta de proyectos inmobiliarios, las ventas aumentan gradualmente reactivados o iniciados por la demanda. Estos mercados son característicos de zonas en expansión de la ciudad o zonas con renovaciones urbanas. La recomendación es empezar a construir o vender proyectos especulativos.
B. Mercado consolidado: o un mercado optimista, donde existen construcciones nuevas, los precios aumentan por la demanda y las ventas son cada vez más aceleradas. Lo ideal es tener ya proyectos construidos y en proceso de ventas para aprovechar el optimismo del mercado. En este momento es crucial monitorear de cerca las variables de mercado que nos indican la modificación de esa fase a la siguiente.
C. Mercado en desaceleración: es el momento de la inflexión. En esta fase hay sobreoferta de inmuebles, la velocidad de ventas disminuye y los precios se estancan. Puede ocurrir por diversas razones: la demanda se satisface o los precios no son competitivos o muy restrictivos. Es el momento para empezar a buscar otros negocios para aprovechar la siguiente fase del ciclo. Por ejemplo, la adquisición de tierra para nuevos proyectos o proyectos que generen flujo de caja.
D. Mercado en recesión: no hay construcciones nuevas, las ventas están en declive y existen proyectos abandonados. Hay sobre oferta y no hay demanda efectiva. Los precios bajan considerablemente, por lo que es el mejor momento para comprar tierra o inmuebles con una función especulativa y ser vendidos en la fase de crecimiento.
En conclusión, si estás interesado en invertir en bienes raíces es importante tomar en cuenta en qué momento del ciclo económico inmobiliario se encuentra la zona de tu interés y definir la mejor estrategia.